NO ME MUEVE, MI DIOS, PARA QUERERTE
(Anónimo)
No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
Tú me mueves, Señor, muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido,
muéveme ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas y tu muerte.
Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera,
que aunque no hubiera cielo, yo te amara,
y aunque no hubiera infierno, te temiera.
No me tienes que dar porque te quiera,
pues aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.
http://www.franciscanos.org/oracion/nomemueve.html
en la Universidad de Cambridge y anteriormente un agnóstico, llegó a la
conclusión de que no podemos simplemente aceptar a Jesucristo como un “gran
maestro”. El dice que debemos aceptarlo como Dios, o debemos rechazarlo
como un farsante, porque sus pretensiones no fueron de un simple maestro sino
de Dios mismo.
Dice C.S. Lewis en su libro Mere Christianity:
“Estoy tratando aquí de impedir que alguien diga la necedad que
frecuentemente dice la gente en cuanto a Jesús: „Estoy dispuesto a
aceptar a Jesús como un gran maestro moral, pero no acepto su
afirmación de ser Dios‟. Eso es algo que no debemos decir. Un hombre
que era simplemente un hombre y que dijo la clase de cosas que Jesús
dijo no sería un gran maestro moral. Él sería un lunático – en la misma
categoría que un hombre que dice que es un huevo cocido – o el diablo
del infierno. Usted debe decidir: o este hombre era, y es, el Hijo de Dios; o
era un loco, o algo peor. Usted lo puede recluir como un necio; o lo puede
escupir y matar como un demonio; o se puede postrar a sus pies y
llamarlo Señor y Dios. Pero no salgamos con un apadrinamiento sin
sentido de su persona como que fue un gran maestro humano. Él no ha
dejado esa posibilidad abierta. No era su intención.”
C.S. Lewis propuso un “trilema”. En vez de un dilema “hombre o Dios”, él
propone debido a las pretensiones de Cristo (por ejemplo “Yo soy el único
camino que lleva al Padre”), esa aseveración debe caer en una de tres
posibilidades: o Cristo era un mentiroso, o estaba loco, o era Dios.
En la gráfica siguiente vemos el trilema que plantea C.S. Lewis. Tres alternativas
que parten de dos posibilidades: Cuando Jesús afirma que es el Señor, hay dos
posibilidades. Es Falso que era Dios, o es Verdad que es Dios. Si es falso, hay
dos posibilidades: él sabía que era falso, por tanto era un mentiroso, un hipócrita
y realmente un demonio con poderes sobrenaturales pero que no era realmente
el Hijo de Dios; o, él no sabía que era falso, sino que era un lunático o demente
que creía sinceramente que era el Hijo de Dios, pero estaba equivocado. Ahora,
si él era realmente quien dijo ser, entonces Él es el Señor, y tú sólo tienes dos
opciones: Aceptarlo para adorarlo como Dios, o rechazarlo para tu propia
condenación.
Por la fé sabemos que ES DIOS,
pero la razón lo demuestra...
A- El Trilema: ¿Era Jesús un mentiroso? ¿Era un loco? ¿Era Dios?
C. S. Lewis (autor de las Crónicas de Narnia) fue profesor de literatura inglesaen la Universidad de Cambridge y anteriormente un agnóstico, llegó a la
conclusión de que no podemos simplemente aceptar a Jesucristo como un “gran
maestro”. El dice que debemos aceptarlo como Dios, o debemos rechazarlo
como un farsante, porque sus pretensiones no fueron de un simple maestro sino
de Dios mismo.
Dice C.S. Lewis en su libro Mere Christianity:
“Estoy tratando aquí de impedir que alguien diga la necedad que
frecuentemente dice la gente en cuanto a Jesús: „Estoy dispuesto a
aceptar a Jesús como un gran maestro moral, pero no acepto su
afirmación de ser Dios‟. Eso es algo que no debemos decir. Un hombre
que era simplemente un hombre y que dijo la clase de cosas que Jesús
dijo no sería un gran maestro moral. Él sería un lunático – en la misma
categoría que un hombre que dice que es un huevo cocido – o el diablo
del infierno. Usted debe decidir: o este hombre era, y es, el Hijo de Dios; o
era un loco, o algo peor. Usted lo puede recluir como un necio; o lo puede
escupir y matar como un demonio; o se puede postrar a sus pies y
llamarlo Señor y Dios. Pero no salgamos con un apadrinamiento sin
sentido de su persona como que fue un gran maestro humano. Él no ha
dejado esa posibilidad abierta. No era su intención.”
C.S. Lewis propuso un “trilema”. En vez de un dilema “hombre o Dios”, él
propone debido a las pretensiones de Cristo (por ejemplo “Yo soy el único
camino que lleva al Padre”), esa aseveración debe caer en una de tres
posibilidades: o Cristo era un mentiroso, o estaba loco, o era Dios.
En la gráfica siguiente vemos el trilema que plantea C.S. Lewis. Tres alternativas
que parten de dos posibilidades: Cuando Jesús afirma que es el Señor, hay dos
posibilidades. Es Falso que era Dios, o es Verdad que es Dios. Si es falso, hay
dos posibilidades: él sabía que era falso, por tanto era un mentiroso, un hipócrita
y realmente un demonio con poderes sobrenaturales pero que no era realmente
el Hijo de Dios; o, él no sabía que era falso, sino que era un lunático o demente
que creía sinceramente que era el Hijo de Dios, pero estaba equivocado. Ahora,
si él era realmente quien dijo ser, entonces Él es el Señor, y tú sólo tienes dos
opciones: Aceptarlo para adorarlo como Dios, o rechazarlo para tu propia
condenación.
¿Era Falso o era Verdad lo que Jesús decía de Sí mismo? (Ejemplo, Juan 14:1 – 11)
El Trilema: O Jesús era un Mentiroso; O era un Loco; O era Dios.
1- ¿Era Jesús un Mentiroso? Vamos a ver que NO….
Si Jesús sabía que lo que él decía era falso, no sólo era un mentiroso,
sino que también era un hipócrita porque él les dijo a otros que fueran
honestos cualquiera que fuera el costo, mientras él, al mismo tiempo,
estaba enseñando y viviendo una mentira colosal.
Peor que mentiroso o hipócrita, era una especie de demonio porque
deliberadamente les decía a otros que confiaran en él para su destino
eterno. También sería un necio porque por esas afirmaciones de que él
era Dios, fue crucificado.
¿Fue Cristo un mentiroso? Nosotros argumentamos que no, por las
siguientes razones:
a) Los judíos trataban de sorprenderle con alguna falta, pero nunca lo
pudieron atrapar (Mat. 22:15)
La mentira es una cadena, es difícil sostenerla. Es imposible engañar a
todo el mundo, todo el tiempo.
b) Sus obras (señales) autenticaban que no mentía (Mat.11:2-6)
c) Cualquiera muere por NO REVELAR la verdad; pero nadie muere por
una mentira.
Un hombre muere por lo que cree que es cierto aunque sea falso; pero no hay
hombre en la tierra que esté dispuesto a morir por algo que sabe que es falso.
2- ¿Era Jesús un loco?
a) A los lunáticos o locos nadie les hace caso; pero a él se
conglomeraban las personas para escuchar su enseñanza y aún sus
enemigos decían “¡Jamás hombre alguno ha hablado como este
hombre!” (Juan 7:45 – 46)
b) Los fariseos no lo tomaron como un loco, sino muy en serio y querían
apedrearlo por “hacerse Dios” (Juan 10:32 – 33)
c) Enseñaba como quien tiene autoridad (Mat. 7:28 – 29)
“Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su
doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los
escribas.”
d) La ley judía establecía que un loco podía ser absuelto de la pena de
muerte. Pero su familia y su propia madre lo dejaron morir en la cruz.
3- Jesucristo es Dios
a) El mismo dio testimonio de ser Dios (Juan 5:19 – 23)
b) La Biblia da testimonio de que El es Dios (Juan 1:1-3, 11, 12, 18)
c) Sus obras testifican que El es Dios (Is. 35:4 – 8 comp. Mat. 11:2 – 6)
d) Sus Títulos (Apoc. 1:8; Is. 9:6 – 7) Admirable, Consejero, Dios fuerte,
Padre Eterno, Príncipe de Paz.
e) Recibió adoración (Juan 20:24 – 29)
f) El Testimonio Histórico: Su resurrección.
Ahora, frente a un incrédulo, debemos preguntarle: “Imagínese que Dios
realmente quiso revelarse al hombre, y descendió en forma humana… ¿Cómo
esperarías que fuera?
Si Dios se hizo hombre, entonces, ¿a qué sería semejante? Alguien ha sugerido
que si una persona amante de las hormigas ve que un hormiguero está en
peligro porque viene una tormenta y trata de gritar a las hormigas para que
huyan por sus vidas, no podrían entenderlo. La mejor forma para que lashormigas entiendan es si logra tener un contacto con ellas por medio de su
lenguaje, por ejemplo, si este hombre se convierte en una de esas hormigas
podría persuadirlas. Si Dios quiso hablar con el hombre y hacerle entender su
mensaje, y decidió hacerse hombre para redimir a sus escogidos, ¿a qué sería
semejante?
Que Él, vele por tí y aquellos que amas.
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